12 tipos de tés e infusiones herbales y sus increíbles beneficios

La herbolaria o fitoterapia existe desde hace miles de años, incluso antes de la aparición de la agricultura; incluso hay evidencia en hallazgos arqueológicos, del uso de plantas con fines curativos. (2)

Comúnmente nuestra despensa puede llegar a tener una buena cantidad de materias primas que pueden utilizarse con fines tanto preventivos, como curativos, con el objetivo de hacer uso de muchos de nuestros recursos naturales para tener un estilo de vida más saludable y ser utilizados en la preparación de alimentos y bebidas cotidianamente. Pero lo más importante de todos estos alimentos es tener conocimiento de cómo podemos utilizarlos en favor de nuestra salud

¿Quién no recuerda las infusiones o tecitos de la abuela?  Una manzanilla para el malestar estomacal o un te de valeriana para relajarnos y dormir mejor.

A continuación, te compartimos una lista de infusiones que además de hidratarte pueden reducir el estrés y hasta bajar los niveles de hipertensión

1. Anís. La infusión de anís ha sido tradicionalmente empleada en problemas del estómago y sistema digestivo. Es expectorante y actúa como relajante muscular. Ayuda al fortalecimiento del sistema inmunitario.
2. Canela. Además de deliciosa y aromática, a la canela se le han atribuido efectos favorables en el sistema digestivo, así como efectos antinflamatorios que regulan los niveles de glucosa en la sangre.
3. Equinácea. Se considera una planta medicinal ya que tiene muchas propiedades, tales como, aminoácidos, fibra y minerales, los cuales refuerzan el sistema inmunitario previniendo resfriados y enfermedades de las vías respiratorias. Tiene además características antibacterianas y antisépticas, por lo que ayuda a combatir infecciones.
4. Hinojo. Una infusión suave que mitiga los problemas digestivos. Destaca además por su acción descongestionante, en casos de tos o enfermedades pulmonares.
5. Jamaica. Es un excelente antioxidante, aporta vitamina C y beneficia al sistema inmunológico, tiene efecto diurético, por lo que se recomienda en personas con presión arterial elevada.
6. Jengibre. Es beneficioso en todo tipo de problemas estomacales y del sistema digestivo. También se utiliza para prevenir resfriados y para aliviar casos de migrañas o dolores menstruales. Debe evitarse en personas con hipertensión, ya que puede elevar la presión arterial.
7. Manzanilla. De los tés e infusiones herbales es el más usado contra el malestar gastrointestinal. Tiene efectos antiinflamatorios, antibacterianos y antimicóticos (contra los hongos). Aplicada de forma tópica, es muy eficaz contra las irritaciones oculares.
8. Menta. Muy apreciada por su sabor refrescante, la menta es muy rica en vitamina C y Carotenos (precursores de la vitamina A). También contiene minerales como hierro, potasio y calcio. Se utiliza para aliviar digestiones pesadas y se considera un buen antiséptico.
9. Romero. Favorece la circulación sanguínea, estimulando la actividad cerebral. Al mismo tiempo, tiene un efecto calmante sobre el sistema nervioso, ayudando contra el estrés y las contracturas. Además, actúa como antiséptico, agente antibacteriano y antimicótico.
10. Salvia. De los tés e infusiones es una de las que tienen un sabor más amargo. Sin embargo, posee potentes efectos antiinflamatorios y antisépticos (desinfectantes). Ayuda a mitigar calambres musculares y a reducir la sudoración excesiva. Es muy útil para tratar infecciones bucales y problemas del sistema digestivo.
11. Tila. Con la flor del tilo se prepara uno de los tés herbales más conocidos para combatir los nervios y el estrés. Se toma también para mitigar cólicos y dolores menstruales.
12. Valeriana. Muy popular porque ayuda a conciliar el sueño, debido a su efecto relajante sobre el sistema nervioso. No debe abusarse de su consumo. (1)

Hacer infusiones frescas y saludables también es posible, simplemente se debe agregar un poco de menta, manzanilla o hinojo en una jarra de agua potable con unas rodajas de limón o naranja y obtendremos una bebida refrescante que aportará los efectos propios de las hiervas.

Finalmente es importante mencionar que las propiedades nutrimentales y medicinales de las plantas, están directamente relacionadas con su de preparación y la cantidad que se consume.

Para preparar una infusión es importante poner a hervir el agua y una vez que llega al punto de ebullición agregar la planta deseada, dejar reposar tapado, y esperar por lo menos 10 minutos para obtener todas sus propiedades. Cabe destacar que, si la infusión tiene más de 12 horas de preparación, es muy probable que disminuya el aporte tanto nutricional como medicinal.

Asimismo, el consumo de estas bebidas, no suplen ningún tratamiento o prescripción realizada por un profesional de la salud, por ello, es muy importante consultar con su médico tratante sobre las indicaciones o contraindicaciones de cualquier infusión medicinal. Las personas que padecen de enfermedades crónicas como hipertensión, diabetes, etcétera, deben mantener al tanto a su médico tratante sobre el uso de bebidas preparadas con plantas, especias y frutas. (3)